La Musulmana no rompe jamás su Relación con sus Hermanas
Una musulmana que tiene conocimiento de su religión sabe
que no debe tener odio hacia las creyentes y que no ha de romper [su relación]
con ellas.
Los errores accidentales no podrían separar a dos
creyentes que se quieren sinceramente por Allah –alabado y ensalzado sea-, dado
que tal relación es considerada como sólida y profunda.
El Mensajero –la paz y las bendiciones de Allah sean con
el- dijo:
“Cuando dos personas se quieren por Allah –alabado y
ensalzado sea- o por el Islam, el primer error cometido por uno en contra del
otro no llega a separarles”. (Bukhari)
Llega, sin embargo [a separar], en una mujer que sucumbe
a su debilidad humana y se deja llevar por el enfado en contra de su hermana en
la religión. Incluso éste enfado llega a conducirle a ofender a su hermana,
causando así la ruptura entre las dos. En éste caso, ella debe recordar que la
duración de ésta ruptura no debe superar los tres días.
“No le está permitido al musulmán romper [su relación]
con su hermano en la religión más de tres días, al punto que cuando se
encuentran, cada uno de ellos se aleja del otro. El mejor de los dos es el que
comienza por saludar al otro”. (Bukhari y Muslim)
La musulmana debe manifestar su deseo de reconciliación
tomando la iniciativa de dirigir le sus saludos porque ella sabe que tendrá un
gran mérito actuando de éste modo. Si su correligionario responde a su saludo,
ellas dos se beneficiarán de la retribución debida a ésta reconciliación, sino
[en caso de que la hermana no responda al saludo] ella habrá cumplido con su
deber y solamente la otra asumirá el pecado de la ruptura.
“No le está permitido a una persona romper [su relación]
con un creyente más de tres días. Una vez que éstos tres días hayan pasado, uno
debe ir a encontrar al otro y saludarle. Si éste responde a su saludo,
compartirán la recompensa de Allah. Si, por el contrario, el otro no responde, será disculpado del pecado de la
ruptura (porque a pesar de que la otra persona no quiso reconciliarse, él actuó
como debía)”. (Bukhari)
Las consecuencias de la ruptura como pecado empeoran en función de su duración. Él –la paz y las bendiciones de Allah sean con el- dijo:
“Quien rompe [su relación] con su hermano en la religión durante un año será considerado como si hubiese derramado su sangre”. (Bukhari)
Según los principios islámicos, la ruptura prolongada entre hermanos no es un pecado venial [excusable] sino que es un crimen en el que la atrocidad y las consecuencias son comparables al asesinato.
El sistema de educación islámico está basado en la fraternidad y en el amor, no admite pues que la vida de los creyentes sea manchada con la ruptura, la hostilidad, ni con el odio porque éstas son actitudes contrarias a la fe.
“No rompáis las relaciones, no os alejéis unos de otros, ni seáis envidiosos, sed hermanos, como Allah os lo ha ordenado”. (Muslim)
En otra versión:
“…El musulmán es hermano del musulmán, él no le hiere, ni le abandona ni le desprecia. Aquí es donde está la piedad. Repitió tres veces esta frase señalando su pecho. La peor maldad que viene de una persona es al despreciar a su hermano musulmán”.
Las consecuencias de la ruptura como pecado empeoran en función de su duración. Él –la paz y las bendiciones de Allah sean con el- dijo:
“Quien rompe [su relación] con su hermano en la religión durante un año será considerado como si hubiese derramado su sangre”. (Bukhari)
Según los principios islámicos, la ruptura prolongada entre hermanos no es un pecado venial [excusable] sino que es un crimen en el que la atrocidad y las consecuencias son comparables al asesinato.
El sistema de educación islámico está basado en la fraternidad y en el amor, no admite pues que la vida de los creyentes sea manchada con la ruptura, la hostilidad, ni con el odio porque éstas son actitudes contrarias a la fe.
“No rompáis las relaciones, no os alejéis unos de otros, ni seáis envidiosos, sed hermanos, como Allah os lo ha ordenado”. (Muslim)
En otra versión:
“…El musulmán es hermano del musulmán, él no le hiere, ni le abandona ni le desprecia. Aquí es donde está la piedad. Repitió tres veces esta frase señalando su pecho. La peor maldad que viene de una persona es al despreciar a su hermano musulmán”.
La musulmana no podría alimentar un odio en contra de su
hermana en la religión o romper [su relación] con ella. Una musulmana no se
rebaja jamás a tal nivel dado que solo [se encuentra] en la mujer que tiene la
mentalidad acomplejada y el espíritu rígido que se encierra en éstos
sentimientos viles de odio y de rencor.
A ésta gente, a los corazones petrificados y a los espíritus rígidos, a los que rompen los lazos de fraternidad, una suerte horrible les será reservada en la vida presente y en la vida futura.
Los textos anuncian que serán privados del perdón de Allah –alabado y ensalzado sea- y de Su misericordia, como tampoco podrán acceder al Paraíso, a causa de su comportamiento.
El Profeta –la paz y las bendiciones de Allah sean con el- dijo:
“¡Conceded un plazo a éstas dos personas hasta que se reconcilien! ¡Conceded un plazo a éstas dos personas hasta que se reconcilien! ¡Conceded un plazo a éstas dos personas hasta que se reconcilien!”. (Muslim)
Abu Darda –que Allah esté complacido con el- dijo:
“¿Querríais que os indicase lo que tiene más mérito que el ayuno y la limosna? La reconciliación entre la gente. Sabed que el odio borra las buenas acciones”. (Bukhari)
Éste máximo merito debe ser meditado por todas las mujeres que se dejan llevar por las acusaciones mutuas y por los conflictos que conducen a la hostilidad.
A ésta gente, a los corazones petrificados y a los espíritus rígidos, a los que rompen los lazos de fraternidad, una suerte horrible les será reservada en la vida presente y en la vida futura.
Los textos anuncian que serán privados del perdón de Allah –alabado y ensalzado sea- y de Su misericordia, como tampoco podrán acceder al Paraíso, a causa de su comportamiento.
El Profeta –la paz y las bendiciones de Allah sean con el- dijo:
“¡Conceded un plazo a éstas dos personas hasta que se reconcilien! ¡Conceded un plazo a éstas dos personas hasta que se reconcilien! ¡Conceded un plazo a éstas dos personas hasta que se reconcilien!”. (Muslim)
Abu Darda –que Allah esté complacido con el- dijo:
“¿Querríais que os indicase lo que tiene más mérito que el ayuno y la limosna? La reconciliación entre la gente. Sabed que el odio borra las buenas acciones”. (Bukhari)
Éste máximo merito debe ser meditado por todas las mujeres que se dejan llevar por las acusaciones mutuas y por los conflictos que conducen a la hostilidad.
Articulo extraído de http://www.tchalabi.com/
Traducido por Ummu Darda Al Andalusiya
Fuente en Español: http://www.salafishispanos.com/viewtopic.php?f=10&t=2294
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