(
“Silsilatul-Hudaa wan-Noor” series grabadas de
Sheijk Muhammad Naasiruddeen al-Albani, rahimahullah)
Grabación nº 329 (00:25:39), (repetido en la grabación nº 351 (00:44:16):
Preguntador:
“Oh Sheijk, el hadiz que aparece en Sahih Muslim, donde el Profeta
Sallalahu Aleihi Wa Salam dijo, con el significado: “Las mejor de las
filas para las mujeres es la última, y la peor para ellas es la
primera”. Así que ahora, es esa regla, como se indica, por lo que se
desprende del hadiz, la misma para las habitaciones cerradas que se
levantan para eso. Significa que en estos espacios cerrados para las
mujeres, en los que están totalmente apartadas de los hombres; y es bien
conocido que cuando (los sabios) hablaron sobre la explicación del
hadiz mencionaron que la razón suyacente para que las primeras filas
sean las peores para ellas es que las mujeres están más próximas a los
hombres, como mencionó an-Nawawi…”.
Sheijk: “¿Sí?”.
Preguntador: “Así que, ¿qué es lo que se desprende del hadiz aplicable a estos espacios cerrados de ahora?”.
Sheijk:
“En mi opinión no soy capaz de responder esta pregunta, porque creo que
el preguntador consiente que este cierre es algo legislado, mientras
que yo no sostengo eso”.
Preguntador: “Sí”.
Sheijk:
“Porque es una innovación (bid’ah). Cerrar a las mujeres apartadas, o
encerrarlas (en habitaciones) en las mezquitas, especialmente en
mezquitas espaciosas, a causa de la corrupción en la sociedad; y
confinarlas a una habitación donde los movimientos del Imam se ocultarán
de ellas, por lo que a veces son susceptibles de realizar sus Oraciones
deficientemente, hasta el punto de ser nula e inválida.
Así que
mi opinión del bloqueo de las mujeres apartadas, en habitaciones
específicas para ellas en las mezquitas, es justo la misma a la de
cortar la fila por tener un minbar alargado. Las dos cosas son asuntos
de reciente introducción. Así que es obligatorio para nosotros volver a
lo que los primeros Salaf hacían.
(Discutimos este tema en detalle ayer. Sí, el hermano estaba presente con nosotros, el hermano estaba con nosotros…).
Por
eso se dice: Las mujeres de hoy son diferentes a las mujeres de ayer, y
se puede añadir a ello: esto es algo atestiguado. Así que esto que se
dice resulta en la conclusión de que es apropiado por consiguiente, que
debamos confinar a las mujeres en estas habitaciones, para que los
hombres no se acerquen a nada de lo que debe permanecer oculto de las
mujeres. Así que di una respuesta relativamente larga, y el tiempo era
corto, así que dije, como parte de una larga discusión: que confinar a
las mujeres a estas habitaciones no es un caso legislado
masaalihul-mursalah (asuntos establecidos para el bienestar de los
Musulmanes), ya que la razón para este confinamiento es el fallo de la
sociedad islámica, y ello incluye a las mujeres, para cumplir las
obligaciones legisladas. Así que si las mujeres entran en las mezquitas
llevando el jilbab legislado, entonces aquellos que construyen estas
habitaciones no tendrían la idea en sus mentes de confinar a las mujeres
en ellas. Sin embargo, cuando se atestigua, desafortunadamente, que
algunas mujeres entran, algunas tal vez con un abrigo, chaqueta, o una
“túnica”, o lo que ellas llaman un “jilbab” hoy en día, y no es un
jilbab, hasta sus rodillas, o algunas veces llevando medias
transparentes de color carne, y así sucesivamente, por lo que la mirada
de los hombres es obligada a mirar lo que debe estar oculto. Así pues
dijeron: Ocultaremos a las mujeres lejos de los hombres en la mezquita.
Por
eso digo: ¡No!. Se trata más bien de que pongamos en práctica el Islam,
y que volvamos a la sociedad islámica en su integridad, no a secciones
de la misma, sino a lo que era la práctica del tiempo inicial. Así que
nos enfrentamos con la sociedad de hoy en día. Queremos que los
Musulmanes regresen: con sus Sabios, sus estudiantes, y con su gente
común, a lo que los Salaf hacían; no a seguir los Madhabs ciegamente,
sino a “Allah dijo…”, “Su Mensajero dijo…”.
No habrá una
prevención de tener puntos de vista diferentes, como no había en el
comienzo, pero no queremos que haya una restricción ciega de seguir los
Madhabs. Queremos que las sociedades, la élite y la gente común, vuelvan
a lo que hacían los Salaf.
Como con el caso de las mezquitas. No
queremos que haya minbares alargados. No queremos que haya minbares
extendidos en forma de artimañas para escapar a las prohibiciones
legisladas (al-Hiyal ash-Shari’ah). Se dieron cuenta de que los antiguos
minbares cortan las filas (para la Oración), por lo que ahora vienen a
nosotros desde un minbar que entra a través de la mihraab, y él asciende
y después aparece a la gente sobre una pequeña plataforma elevada. ¿Por
qué todas estas distorsiones y vueltas?. (Todo lo que es necesario) son
tres escalones, y Allah ha bastado a los Creyentes para que no tengan
necesidad de luchar. La mejor guía es la guía de Muhammad. ¿Cuántos
dinares y dirhams es el costo para que el khateeb ascienda a esta
plataforma?. Basados en esta afirmación: “No queremos que se corten las
filas”. Esta es una demanda buena. Este es el caso. Sin embargo, se
puede alcanzar sin todo este esfuerzo innecesario: tomar un minbar que
consta de tres escalones, y el problema se acabará. Del mismo modo, no
queremos que haya toda esa decoración.
Y por último, no queremos
estas habitaciones para las mujeres. Queremos para las mujeres lo que
queremos para los hombres: lo que fue previamente presentado: que las
mujeres entren llevando hijab, y que los hombres avancen hacia las
primeras filas.
Entonces, en ese caso, el hadiz anterior
aplicará: “Las mejor de las filas para las mujeres es la última, y la
peor para ellas es la primera”.
No queremos invertir la
indicación del hadiz teniendo en cuenta la aberración que ha aparecido
con la construcción de estas habitaciones en las mezquitas”.
* Compilado por Abu Talhah Dawud ibn Ronald Burbank.
Traducido del Inglés por: UmmuAbdulKarim al Isbaniya
Fuente: http://alitisaambissunnah.wordpress.com/2011/11/11/separate-rooms-for-the-women-in-the-mosques/